3.
Dos coordenadas del lenguaje
musical.
Parámetros horizontales de la
música
Desarrollo de la reacción a la
duración del sonido (educación
rítmica). El desarrollo del oído
rítmico musical se consigue con
ayuda de un sistema especial de
solmisación rítmica. La palabra
“solmisación” se utiliza aquí en
un sentido más amplio: es un
sistema de sílabas activamente
articuladas, con las cuales se
define la altura del sonido y
los elementos del ritmo. La
esencia de la solmisación
rítmica empleada en el Método
Brainin consiste en que las
sílabas especiales no simbolizan
la duración del sonido, sino la
ubicación de los sonidos en el
caudal sonoro.
En el sistema se utilizan solo
cuatro notaciones: para la
posición más débil, la débil, la
fuerte y la más fuerte de uno u
otro tono. Por posición más
fuerte se entiende el acento de
la frase (clímax o culminación),
por fuerte el comienzo del
tiempo del compás, por débil las
posiciones siguientes a la
posición
fuerte
y por más débil todo lo demás. A
cada una de estas posiciones le
corresponden cuatro signos
silábicos inteligentemente
aplicados.
Cualquier organización del
tiempo tiene que ver con un
fenómeno rítmico. En particular,
el ritmo estructural lo
constituyen las relaciones y
proporciones entre secciones y
movimientos de una forma
musical; el ritmo armónico está
representado por las relaciones
entre las duraciones de las
funciones armónicas; el ritmo
polifónico es inherente al
resultado que produce la
interacción de voces
independientes, y de aquí la
relación que existe entre los
momentos de tensión y distensión
de la textura.
[sigue]